domingo, 10 de agosto de 2008

FUNGI

     Era el ultimo de su clase sobre la faz de la tierra.Artificial, para variar.Estaba parado en la montaña mas alta. Abajo, las luces de las ciudades traspasaban como lanzas los negros nubarrones de una noche tormentosa. Lluvia acida. La primera precipitacion en 5 años.Las gotas caian sobre el, rodaron y pararon el en suelo siendo succionadas con rapidez por las sedientas raices.Creado por la humanidad, pero en el fondo parte de ella.Su propósito representaba el esfuerzo conjunto de la comunidad cientifica del planeta. En su existir estaba la esperanza de el hombre que pretendia reverdecer la totalmente envenada tierra. El proyecto consistía en insertar genes vegetales en un ser humano, en orden de crear un arbol humanoide que pudiera controlar el ciclo de reproducción vegetal de forma conciente. El experimento fracasó y obtuvieron un desagradable hombre-fungi. Un hongo venenoso y letal.¿Irónico no?
El hombre envenena la tierra y su supesta cura termina convirtiendose en una trufa envenenada.Sabia que le iban a deshechar, asi que escapó del laboratorio.Huyó a las montañas donde su condicion le orilló a comprender que lo unico que podia crecer en esas tierras eran hongos ya que los restos de los vegetales y arboles caidos nutrieron a la tierra de aquello que le hacia continuar con vida: Nitrogeno.Azorado por el descubrimiento, el hombre-fungi pensó en regresar a la ciudad a contarle a sus congéneres sobre la posible cura para ese mal antiguamente conocido como "contaminación".Pero se dio cuenta de que el ciclo se repetiria. Asi que tuvo que tomar una desición.Parado sobre esa montaña y mirando hacia las ciudades esperó una corriente de aire. Aun siendo humano no había probado la dicha de ser padre. Pero todo cambiaría esa noche.¡Boom!El hombre-fungi estalló liberando millones de esporas y millones de esperanzas. Entregaba su vida con tal de crear un nuevo comienzo.A la mañana siguiente estaban en todos lados. En las casas, los hospitales, autobuses, oficinas, en el palacio de gobierno, circos, aeropuertos, playas, en los centros comerciales, los estacionamientos y cementerios.El deseo del hombre-fungi se habia cumplido. El ser humano regresaba a la naturaleza. Millones de hermosos y letales hombres, mujeres y niños fungi se levantaban perezosamente con la humedad de la lluvia nocturna y los primeros rayos del sol.

2 comentarios:

Moisés R. Rios dijo...

Adoro la ciencia ficción con crítica social, muy buena combinación =)

Belena Flores dijo...

Me gusta la palabra "espora".
Nomás de leerma me provoca que me pique la nariz y estornude.